¿Sabes escuchar? 21Ago

¿Sabes escuchar?

Son muchos los que me habéis insistido en que trate el tema de saber escuchar. Seguramente, por no haberlo hecho adecuadamente, he retrasado esta nota de respuesta, a la que necesariamente deberán seguir otras. Objetivamente, la importancia de saber escuchar se pasa por alto con demasiada frecuencia. Estamos probablemente ante la competencia personal y profesional más necesaria, puesto que debería ser la más usada; y sin embargo, quizás sea la peor “ejecutada”. Si somos directivos o profesionales, es seguro que la mayor parte de nuestro tiempo de relación con otros debamos emplearlo en escuchar lo que nos dicen, por lo que resulta crítico hacerlo correctamente. En nuestra vida hemos asistido a múltiples programas de formación para desarrollar competencias diversas, pero pocos o ninguno de ellos han tratado de enseñarnos a escuchar. Como si fuera algo innato o espontáneo y que no hubiera necesidad de aprender. Sin embargo, en una conversación es frecuente caer en el defecto de estar pensando en lo que vas a decir a continuación, tan pronto encuentres un hueco, en ver de prestar atención a lo que te están diciendo. Ese tratar de colocar tus puntos de vista u opiniones te impide conectar con tu interlocutor. Y al actuar así no averiguas sus sentimientos y preocupaciones, por lo que no serás capaz de atenderlos adecuadamente. Mas aún. Una cosa es lo que te dicen y otra cosa lo que significan. Hay mucho más que te quieren comunicar y que no está en las palabras que emplean. ¿Eres capaz de identificar esa información implícita? Por tanto, calma, céntrate y presta una atención sincera a lo que te está diciendo ese colega, cliente, o empleado. Serás capaz entonces de utilizar lo que te dicen en beneficio propio y de tu interlocutor. Te sorprenderá...

Consideraciones

No te fíes de tu certeza. Cuanto más seguro estés de algo, y antes de que otros te lo pongan de manifiesto, pregúntate qué puedes estar olvidando… La idea de que tener más siempre es mejor, de que es insuficiente lo que ahora tienes, sólo puede conducir a la frustración. Es preciso identificar aquello que ya tienes y que añade un valor extraordinario a tu vida. Si tienes dudas, imagina que no lo...

Tu tribu 10Ago

Tu tribu

¿A cuál perteneces? Lamentablemente, pertenecer hoy a una tribu, pandilla, banda o clan suena extraño o incluso peligroso. Estos términos hacen referencia a una vinculación entre sus componentes más estrecha de lo que la palabra «grupo» transmite. Pertenecer a ellas proporciona la oportunidad de compartir valores, participar de conversaciones donde intercambiar honestamente ideas. Exigen tiempo y requieren esfuerzos, pero curan el individualismo y otros muchos defectos. Nos permite estar unidos por unos lazos estrechos y preservar la diversidad individual. Las redes sociales son una opción interesante. Suelen ser una buena manera de comenzar, pero no bastan. Otros grupos más habituales me parecen excesivamente repetitivos (fútbol, política…), internamente uniformizantes, y excluyentes en su relación con el exterior. No te lo pierdas. Busca tu tribu. Organízala...

Consideraciones

Nunca abandones el objetivo de aprender y desarrollarte. Y al mismo tiempo acéptate como eres. Te ayudará a afrontar sin miedo los desafíos y a asumir los contratiempos con naturalidad. La búsqueda de la excelencia, si bien requiere un esfuerzo implacable, es fuente segura de satisfacciones duraderas. Alcanzarla exige determinación, posponer a veces recompensas (en ocasiones avanzarlas para mantener la motivación), no dejarse vencer por la comodidad. En caso de duda, asume tú la responsabilidad. Es una característica del...

¡No lo sé…! 06Ago

¡No lo sé…!

¿Te cuesta decirlo? No puedes ser de esas personas a las que les cuesta decir que desconocen un asunto. Las hay, con demasiada frecuencia, que piensan que deberían saber lo que desconocen y eso les lleva a fingir. Pretenden saber, miran de adivinar, y acaban “metiendo la pata”. Es un lujo poder decir “no lo sé…”, y enormemente liberador. Es horroroso ser una de esas personas que parecen estar sometidas a la presión de tener que saberlo todo. Deben pensar que su valía ante los demás depende de tener siempre una respuesta a mano. Lo único que demuestran es una tremenda inseguridad y falta de autoestima. ¿Lo...

Hábitos

El dinamismo del mundo actual te puede generar desánimo dada la rapidez de su progresión. Te parece que no eres capaz de estar al día de tantas cosas como suceden. Profesionalmente puedes estar confuso respecto a qué es lo importante a seguir, lo verdaderamente relevante y que evitará que quedes descolgado. Para realizar bien una tarea tienes que convertirla en hábito, es decir, la repetición persistente de esos mismos actos. Por tanto, ya sabes lo que tienes que hacer si buscas destacar en algo. No puedes escudarte en que no has nacido para ello. La experiencia confirma que podrás destacar en alguna o varias de esas novedades, tecnologías, tendencias…, si te dedicas a ellas el tiempo suficiente. Habrás de superar frustraciones y dificultades, pero si mantienes el esfuerzo lograrás avanzar e incluso convertirte en un experto. Para ayudarte a lograrlo puedes tener en cuenta estos puntos: Elige lo que te apasione. Te proporcionará la motivación que te ayudará a perseverar. Aborda lo más difícil primero y cuando estés con más energía. Lo más probable es que empieces el día con esas tareas. Practica sin interrupción. Repite las actividades y nunca les dediques más de 90 minutos cada vez. Luego dedícate a otras cosas. La frecuencia de repetición dependerá de tu compromiso y disponibilidad, pero los más profesionales no suelen dedicar más de 4 horas al día. Desarrolla rutinas. Es la mejor manera de asegurar que la dificultad de la tarea no te venza. Con el tiempo el esfuerzo será cada vez menor. Elige un mentor. Probablemente no deberás acudir a él más que una vez a la semana. Te corregirá posibles desviaciones y te ayudará a decidir hasta dónde llegar. Desconecta periódicamente. El descanso ayudará a que te recuperes del esfuerzo y a fijar...

Celebra los pequeños éxitos 01Ago

Celebra los pequeños éxitos...

La mayoría sólo piensa en celebrar las grandes victorias. Y a la vez, ante el menor contratiempo estallan enfadados. Y si muestras tu emoción por una pequeña victoria…, parece que te miran mal. No les parece justificado ni equilibrado. Todos seríamos más felices si compartiéramos nuestra emoción por alcanzar esos pequeños logros. ¿Qué celebrarás...

¿Qué has logrado…?...

Es la pregunta pertinente para estos días y esta época del año. Tienes muchos objetivos y sin embargo, cuando revisas lo que has alcanzado en los últimos tiempos apenas puedes identificar algunos logros. No es que no hayas trabajado, es que te has centrado en las actividades y has perdido de vista el objetivo. El activismo puede llevarte a realizar infinidad de tareas pero los resultados se te resistirán. Y dado que nos evalúan y premian por nuestro rendimiento, que son los logros los que nos producen satisfacción, es preciso cambiar esa dinámica. Quizás te ayude el planificar los resultados que esperas alcanzar las próximas semanas. Hacerlo así te ayudará a centrarte en su consecución y tus actividades sólo tendrán sentido en la medida que se subordinen a la obtención de esos logros. El resto de ellas son secundarias, deberían esperar o incluso las podrías eliminar. Evitarás la dispersión y te sorprenderá la mejora de tu eficacia. Prueba con tu principal objetivo...

Consideraciones

Ni los negocios son una guerra ni un juego suma cero. Ganar está bien, pero no siempre lo conseguirás. Perder hoy, enseña; y los esfuerzos dedicados seguro que son útiles en ámbitos que ahora no imaginas. Antes que la palabra fracaso, prefiero a sus sinónimos: revés, fallo, decepción, caída, frustración, descalabro. Me transmiten la idea de aprendizaje, superación, crecimiento personal. Recupérate de inmediato. Como te caerás seguro, cuanto antes te levantes y te pongas de nuevo en marcha, mejor. Sirve de poco llorar o lamentarse. Aprende a abandonar. Hay ocasiones en las que debes dejar un puesto de trabajo, cerrar un proyecto, acabar una relación, despedir a alguien. Por pereza o comodidad no lo haces con la frecuencia que debieras. Resultado: Frenan tu desarrollo, limitan tus posibilidades, malgastas recursos. No te entretengas con excusas. Nadie las escucha. Prestarán atención a tus resultados. Ponte a ellos de nuevo cuanto...

Incertidumbre 28Jul

Incertidumbre

Afortunadamente no estamos predestinados a seguir un camino cuyos pasos ya han sido establecidos. Ser dueños de nuestras decisiones nos hace libres, a la vez que nos puede generar inquietud el desconocimiento de los resultados de las mismas. Hay quien se maneja mal en la incertidumbre, lo que resulta muy limitante dado que todo el tiempo hemos de hacer frente a decisiones de resultados inciertos. Y para evitar el desasosiego, miran de apresurar sus soluciones. ¿Eres capaz de reconocer que no siempre tienes una respuesta inmediata? Hacerlo es dar el primer paso para alcanzar una solución mejor: buscarás la ayuda de otros, investigarás, te informarás… No hacerlo te puede llevar a dar respuestas mediocres y emprender acciones equivocadas. La humildad lleva a administrar la incertidumbre con...

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