Si lees este blog es que, de alguna manera, estás incorporado a la revolución de las redes sociales. Quizás no te veas como un innovador ni un pionero, pero no estás muy lejos de serlo. Aún estás a tiempo de liderar su implantación en tu empresa o actividad profesional. Para lograrlo, y antes de lanzarte a abrir un sinfín de cuentas en distintas plataformas y de empezar a publicar quién sabe qué información, detente a pensar en lo siguiente: Quién es tu audiencia y qué esperas que obtengan de ti Cómo se integra esta estrategia en las redes sociales con tu modelo de negocio Qué objetivos te estableces en distintos ámbitos, internos y externos Qué recursos intangibles y materiales necesitas Dónde encontrarás el soporte tecnológico Con qué periodicidad publicarás Cómo incitas a participar a tu público interno ¡No lo retrases...
Objetivos cercanos
(Para equilibrar la nota de ayer…) Cuando el entorno empresarial es incierto y dinámico algunos proponen alejarse de lo inmediato y trabajar para la construcción del largo plazo. Ciertamente es más cómodo aunque no parece del todo sensato. Una consecuencia probable de esta actitud es no saber responder a los retos del corto plazo y quedarse por tanto sin futuro. En circunstancias como las actuales, los objetivos estratégicos han de ser cercanos, próximos en el tiempo, lo que hace que sea más factible alcanzarlos. No suele ser una práctica habitual. Son muchas las empresas que se desalientan al tener que afrontar situaciones ambiguas y complejas. Como directivo debes ayudar a resolver parte de esa complejidad redefiniendo los problemas de manera sencilla para que sean más fáciles de abordar. No sirve por tanto quedarse “en las alturas” y anunciar aspiraciones ambiciosas, sin clarificar la manera de superar los obstáculos que permitirán alcanzarlas. La única salida es transformar la complejidad en objetivos cercanos. Cuanto más cercanos sean esos objetivos: Más fácil será evitar la dispersión y por tanto concentrar el esfuerzo en los aspectos de mayor impacto. Más sencillo será identificar los proyectos y tareas que permitirán alcanzarlos. Antes podrás beneficiarte de la obtención de resultados. Más próximos serán a las capacidades y habilidades de la gente que los ha de ejecutar. El efecto conjunto será la mejora de tu posición estratégica. Dos observaciones adicionales: Has de tener presente que los objetivos estratégicos no son independientes. Se desarrollan en una organización que debe funcionar en sus distintos niveles. Determinados objetivos dependen para su realización de que existan las capacidades adecuadas para poder realizarlos. De no ser así, el objetivo cercano más sensato sería el adquirir esas capacidades. Esos objetivos cercanos estarán, en lo posible, orientados por...
Ambición
Puesto que se trata de un sueño, sueña a lo grande. Es llamativo lo poco frecuente que es que alguien se haya parado a soñar y lo pueda verbalizar. O que sólo refieran ambiciones pequeñas y de corto plazo. No te pongas límites. Los grandes logros nunca parecieron razonables en su origen. Si al ver escritos tus objetivos no tiemblas, es que no son los que necesitas. Deben representar un gran reto y motivarte lo suficiente para que realices el enorme esfuerzo que te demandarán. Han de ser la causa de tu transformación. Te han de llevar donde no estás hoy, convertirte en quien no creías posible llegar ser. ¡Que sueñes y te...
Sé hoy
Tu objetivo es ser hoy aquello en lo que te quieres convertir. Hazlo, muestra iniciativa. No esperes a tener la posición que deseas y a que alguien te proporcione la formación necesaria. Si lo eres lo conseguirás, y no al...
¡Pide ayuda!
Busca la ayuda y la cooperación de las personas que precisas para alcanzar tus objetivos. ¿Sabes quiénes son? Te ayudará el ejercicio de enumerarlas en una lista. No te olvides de la familia, de tu jefe y compañeros de trabajo, de los clientes que comprarán tus productos y servicios en las cantidades que necesitas… Después, piensa en qué les das, no fuera que sólo pienses en ellos por lo que a ti te interesa que te den. Necesitas la ayuda y el apoyo de muchas personas para lograr tus objetivos. Algunas de ellas tendrá un papel clave en determinados momentos de tu vida. Tu éxito se construirá a partir de tu red de contactos, personas a las que ayudarás sin esperar nada a cambio y que te ayudarán por lo que te aprecien. Puedes seguirme en...
Actividades facilitadoras para conseguir tus objetivos...
Para que puedas alcanzar los objetivos que te has establecido, es importante determinar las actividades que te permitirán alcanzarlo. No se trata tanto de las actividades específicas propias del objetivo como de otras tareas previas y genéricas que te facilitarán el proceso de lograrlo. Aquí tienes algunas de ellas: Lee tus objetivos todos los días. Esto puede parecer muy trivial, pero en realidad es muy importante. Leer los objetivos en voz alta todos los días no sólo ayuda a tenerlos presentes; además se graban de modo intenso en el subconsciente. De esta manera la propia mente se entrena en el ejercicio de pensar las maneras de lograrlos. Con frecuencia alcanzar tus objetivos te exigirá cambios, hacer cosas a las que no estás acostumbrado. El leer los objetivos se inicia el proceso de cambio donde primero debe comenzar, en tu propia mente. Seis tareas primordiales cada mañana. Cada noche puedes anotar seis tareas que te ayudarán a ser más eficaz en la consecución de tu objetivo. Al día siguiente trata de completar tantas de ellas como te sea posible. Si alguna se quedó sin hacer pásala para el día siguiente. Cambia tú mismo. Es esta una de las mejores actividades para conseguir tus objetivos. Si estuvieras haciendo todo lo necesario para alcanzar tu objetivo probablemente ya lo habrías alcanzado. Dado que no es así, quizás deberías cambiar algunas de las cosas de las que haces. Mira de progresar al menos en un área cada día. Esto te acercará a la persona que necesitas ser para lograr tus objetivos. Puedes seguirme en...
Fijación de objetivos...
Plantearse objetivos es algo que todos hacemos. Sin embargo la mayoría de las personas no son capaces de alcanzar sus objetivos por no tener una imagen clara de lo que desean alcanzar y no poner en marcha las acciones adecuadas para lograrlos. Estos pasos pueden servir para mejorar la capacidad de establecer objetivos. Ser específico y concreto en cuanto a la definición del objetivo. Tiene que quedar claro lo que realmente se pretende alcanzar. En lugar de aspirar a ser rico, especifica una determinada cantidad que se desea lograr. De esta manera se puede medir la progresión hacia la consecución del objetivo. Establecer un plazo de tiempo para lograrlo. Esto le permitirá evaluar el nivel de desempeño. El disponer de un plazo aníma a trabajar para alcanzar el objetivo en la fecha límite y poner en marcha medidas con el fin de lograrlo. Ser realista. No hay nada malo en establecer unas metas altas pero será preciso cambiarlas si se da observa que no son realistas. Evaluar el rendimiento. Es necesario disponer de indicadores que señalen que tan cerca o lejos se está de lograr el objetivo. Si se observas un posible retraso respecto a lo esperado se podrán iniciar las medidas correctoras adecuadas. Asumir que se encontrarán dificultades. En la mayoría de los casos aparecerán obstáculos que dificultarán alcanzar la meta. Se ha de estar preparado para experimentar cierta frustración y desaliento y conocer como superarlos. Identificar las razones detrás de cada objetivo. No siempre la definición de un objetivo proporciona la motivación suficiente para lograrlo. Ser consciente de las razones últimas que empujan a alcanzar el objetivo anima a no escatimar los esfuerzos...