Hoy toca reflexionar acerca de tu desarrollo personal y profesional. ¿Qué has aprendido en las ultimas semanas o meses que haya servido para tu mejora como persona y como profesional o directivo? ¿Qué has descubierto sobre nuevas maneras de llevar a cabo tu negocio? El avance de nuestra sociedad en todas las dimensiones imaginables es inmenso y no progresar con ella es quedarse descolgado.Está muy bien que sigas este blog (no sabes cómo te lo agradezco), pero no basta sólo con eso. Debes aprender además de manera proactiva. Comprometerte con algo que aparezca en tu agenda como un objetivo estratégico. Y esta preocupación debe extenderse también a quienes trabajan contigo. De no hacerlo, tu empresa se resentirá. He aquí algunas sugerencias que podrían ser de utilidad: Aplicación de las nuevas tecnologías Identificación de nuevos modelos de negocio Averiguar cómo llegar a mercados internacionales Nuevas manera de dirigir Herramientas de mejora de la eficiencia y orientación a resultados La asignatura siempre pendiente: aprendizaje de idiomas Calculo que si te pones a ello con constancia, en cualquiera de los temas, en dos meses y con una dedicación a tiempo parcial, te situarás entre el 2-5% más preparado no ya del país sino del mundo. Desde aquí te seguiremos ayudando. Es la idea que mueve a la Red Delta. No lo hagas solo. Búscate un mentor, y si necesitas orientación...
Coparticipación
Una aplicación práctica de lo que comentábamos ayer (Rinde tu juicio) consiste en preguntar la opinión de los empleados. Las estructuras organizativas tradicionales en las sólo parecen pensar los niveles directivos más altos no son las apropiadas para resolver los retos a los que enfrentan. No responden a las aspiraciones actuales de las personas ni animan a la creatividad, a la innovación o la asunción de responsabilidades. No son capaces de desarrollar, ni sacar partido, ni retener el talento de sus empleados.Hay muchos ejemplos de organizaciones que se rigen hoy por estos nuevos parámetros: Google, Facebook, Wikipedia, HCL Technologies…, ¿tu despacho profesional?. Siguen un modelo parecido al del desarrollo del software de código abierto: La responsabilidad del cambio pasa de los directivos a los empleados. Esto les convierte en emprendedores, y aunque fuera una minoría la que se implicara verdaderamente, los efectos serían extraordinarios. Hacer sentir a los empleados que son valiosos. Crear una cultura en la que se sientan escuchados y sus ideas reconocidas, independientemente de su rango, posición o antigüedad. Información transparente. La información se comparte entre todos los empleados. Se facilita la generación de confianza entre directivos y colaboradores y no se oculta nada. Incluso los salarios, los logros y las evaluaciones se hacen públicas. Habla con tus colaboradores para comentar la estrategia y la orientación de la empresa. Anímales a que hagan preguntas y sugerencias que les ayuden a mejorar su contribución a la misma. Comparte las preocupaciones y comentarios entre todos. Si dudas en ponerlo en marcha porque no confías en ellos, ya puedes imaginar lo que te toca...
Rinde tu juicio
Seguro que, por tu preparación y experiencia, te ves capaz de debatir con agudeza las opiniones y argumentos de los demás. Pero… ¿alguna vez pones a prueba los tuyos? ¿Te cuesta cambiar de opinión? ¿Cuando fue la última vez que lo hiciste? ¿Crees que eres el único en tu empresa que piensa…? ¿Son los demás los que han confrontar habitualmente tus posiciones? ¿Cómo reaccionas cuando te llevan la contraria? Una buena prueba de competencia profesional y liderazgo es disponer de la capacidad de superar las propias barreras mentales. Cambiar de opinión no siempre es una muestra de inseguridad o desconocimiento. No es que trates de agradar a unos y a otros, sino que demuestras… tener una mente abierta, madurez, humildad; que no pretendes imponer tus argumentos a toda costa; que estás dispuesto a aprender; que te mueves por convicciones y no por mantener tu ego. Nadie tiene todas las respuestas. Y con la edad y en los tiempos que corren, cada vez siento que son menos las certezas. Lo relevante, por tanto, es crecer y desarrollarse; y eso exige con mucha frecuencia rendir el propio juicio. Las opiniones de los demás te ayudarán a mejorar las tuyas o te proporcionarán ideas nuevas. Un tesoro para tu empresa u organización que no puedes despreciar. Y como entonces serás muy bueno en tus decisiones, ¡sólo te equivocarás una vez de cada...
Lo nuclear
De diversas lecturas recientes llego a la conclusión de que para asegurar la viabilidad a largo plazo de tu empresa es preciso incorporar estos principios: Servir: El compromiso con el servicio a los clientes no es la responsabilidad de un determinado departamento. Es una mentalidad, una cultura y modo de pensar que debe caracterizar a toda la organización. Y aquí servir es identificar y atender sus necesidades, no de manera abstracta sino orientada a que puedan cumplir con sus trabajos o negocios y ganarse mejor la vida. Céntrate en las relaciones: Independientemente de lo que vendas, mantienes una relación de servicio con tus clientes, empleados y colaboradores. Lo importante es cultivar y hacer crecer esa relación, que será la base para la futura generación de valor, y por tanto es más importante que políticas, procedimientos y normas que, de anteponerse a las personas, destruirán valor. Muerte a las burocracias. Capacita, potencia, forma a tu gente: Tu negocio se basa en el intercambio de valor entre personas. Tu personal debe estar preparado, habilitado e instruido para proporcionar de manera autónoma ese servicio. Es enriquecedor para ellos y para la cuenta de resultados. Nunca te pares: La obligación de servir no responde a una moda pasajera. Exige constancia y estar centrado en ello, realizando los ajustes que con el tiempo sean precisos. Siempre puede mejorarse y los clientes siempre lo van a valorar. De hecho, estos principios son de gran ayuda a la hora de inspirar la definición de la misión de tu empresa y habrán de formar parte de sus valores identitarios. ¿Nos ponemos a revisar de nuevo la...
Acera del liderazgo
Algunas ideas sobre liderazgo que he leído en un libro reciente: No se aprende liderazgo en un aula ni se adquiere automáticamente porque te de nombren un alto cargo o te den una gran responsabilidad. El liderazgo se descubre y no existen atajos. El liderazgo consiste en encontrar y mantener la energía para crear un futuro mejor. Para ser un líder hay que sentir con fuerza las deficiencias de la situación actual y decidir hacer algo para cambiarla. Todo líder debe descubrir en primer lugar su fuente personal de energía. Para ello debe tener absolutamente claras dos cosas: su propósito, lo que quiere alcanzar, y sus valores, los principios que guiarán su actuación. Después se ha de dedicar a alinear la energía de los demás hacia la consecución de ese propósito compartido. Las tres palancas para conseguir la realización del propósito de la organización: El cerebro; su visión y estrategia. Define y establece la dirección. Los huesos; La estructura organizativa, disponer de las personas y los procesos adecuados. Está diseñada para ejecutar la estrategia. Los nervios; La cultura de la organización, lo que la gente hace cuando nadie mira. El líder concreta la cultura mediante la definición y comunicación de un conjunto de comportamientos claramente identificables. La mejor manera de comunicarlos es vivirlos. El líder refuerza la cultura alineando los sistema de reconocimiento y remuneración con el cumplimiento de los comportamientos deseados. La visión y la estrategia deben ser comunicados de manera que sean fáciles de entender y que motiven a la acción. Igual te...
Consideraciones
No te fíes de tu certeza. Cuanto más seguro estés de algo, y antes de que otros te lo pongan de manifiesto, pregúntate qué puedes estar olvidando… La idea de que tener más siempre es mejor, de que es insuficiente lo que ahora tienes, sólo puede conducir a la frustración. Es preciso identificar aquello que ya tienes y que añade un valor extraordinario a tu vida. Si tienes dudas, imagina que no lo...
Ir más allá
Hace unos días comenté de pasada mis dificultades para resolver el problema de un teléfono con una operadora de telefonía móvil y su fabricante. Hoy debo decir que se arregló satisfactoriamente gracias a una persona que, en una de las tiendas de la operadora, decidió ir algo más allá de lo que debía ser la definición de su puesto de trabajo. Lo que en inglés se llama “caminar una milla extra”. (Le felicité, por supuesto). Ese ir más allá fue lo que consiguió resolver un problema que se arrastraba desde hacía dos semanas. Y lo traigo a aquí como ejemplo de lo que debe ser la verdadera propuesta de valor para el cliente. Es mucho más que dar un buen servicio al cliente o de gestionar la experiencia del mismo en el punto de atención. Es algo estratégico. Se trata de hacer esas pequeñas (o grandes) cosas extras que hacen que el cliente se sienta el centro del negocio, que verdaderamente piense que te ocupas de él, y que pueden llevar a satisfacer su necesidad como nadie más en el mercado. Como siempre, en esos casos, el precio no juega ningún papel. En este enlace encontrarás diversos ejemplos de cómo algunas empresas caminan esa milla adicional por sus clientes. ¿Puedes pensar en algún pequeño detalle de lo que podría ser ir “una milla más allá” en tu negocio? ¿Me lo...
Tu tribu
¿A cuál perteneces? Lamentablemente, pertenecer hoy a una tribu, pandilla, banda o clan suena extraño o incluso peligroso. Estos términos hacen referencia a una vinculación entre sus componentes más estrecha de lo que la palabra «grupo» transmite. Pertenecer a ellas proporciona la oportunidad de compartir valores, participar de conversaciones donde intercambiar honestamente ideas. Exigen tiempo y requieren esfuerzos, pero curan el individualismo y otros muchos defectos. Nos permite estar unidos por unos lazos estrechos y preservar la diversidad individual. Las redes sociales son una opción interesante. Suelen ser una buena manera de comenzar, pero no bastan. Otros grupos más habituales me parecen excesivamente repetitivos (fútbol, política…), internamente uniformizantes, y excluyentes en su relación con el exterior. No te lo pierdas. Busca tu tribu. Organízala...
Consideraciones
Nunca abandones el objetivo de aprender y desarrollarte. Y al mismo tiempo acéptate como eres. Te ayudará a afrontar sin miedo los desafíos y a asumir los contratiempos con naturalidad. La búsqueda de la excelencia, si bien requiere un esfuerzo implacable, es fuente segura de satisfacciones duraderas. Alcanzarla exige determinación, posponer a veces recompensas (en ocasiones avanzarlas para mantener la motivación), no dejarse vencer por la comodidad. En caso de duda, asume tú la responsabilidad. Es una característica del...
Confianza
Es difícil de conseguir y muy rápida de perder. Es lo que sustenta una relación de amistad y a la que sólo se llega tras mostrar en muchas ocasiones que te haces merededor de ella. Para lograrlo habrás de actuar en toda ocasión buscando el bien del otro, independientemente de quien sea, sin esperar reciprocidad. En tu caso ofrécela. Si te parece arriesgado…, lo es menos que no hacerlo. Te ayudará a conseguirlo si: Hablas claro Demuestras respeto Eres transparente Pides perdón si te equivocas Te muestras leal Trabajas bien No te escondes Miras de mejorar Evitas defraudar expectativas Rindes cuentas Sabes escuchar Cumples lo que prometes Crees en los demás Ya podemos...