Organización y Personas

Ayer hablábamos de la primera historia que el genio Steve Jobs compartía con nosotros en su celebre discurso de Stanford.

 

Hoy queremos hablar de la segunda de ellas. En esta historia habla de lo que denomina el amor y la pérdida; el amor por lo que te apasiona y el miedo por su pérdida potencial. El mensaje principal es que hay que descubrir lo que amas o te apasiona y perseguirlo de una forma entusiasta, constante y sin resignación. 

 

Dice que, sin embargo, “la vida a veces te golpea con un tocho en la cabeza”, sacudiéndote donde mas te duele. Es en esos momentos cuando no se debe caer derrotado y continuar persiguiendo lo que realmente amas.

 

De sus palabras destaca su obsesión por escuchar su voz interior y descubrir su vocación, así como la tenacidad, pasión e inconformismo mostrado por alcanzarla. Sin duda una fórmula imbatible para tener éxito.

 

Lo cierto es que, la circunstancias en la vida pasan con una velocidad y cadencia que sentimos, en ocasiones, que nos dirigimos a donde la corriente nos lleva. Tener la serenidad e inteligencia de detenernos periódicamente a clarificar si ese es el lugar donde queremos estar es un consejo poderoso.

 

Se trata, como dice Jobs, de ser autoexigente y admitir que el trabajo es demasiado importante en términos de tiempo y dedicación para consumirnos en algo que no nos motiva.

 

Muchas veces caemos en la trampa de pensar que esa exigencia de realización profesional es un sueño no alcanzable dadas nuestras circunstancias puntuales. Pensamos que quizás nuestro entorno, pasivos personales o trayectoria nos aleja de una forma irreversible de nuestros deseos y vocación.

 

Puede que, en el corto plazo sea así, pero en el medio y largo plazo es difícil que no tengamos capacidad para transformar nuestras circunstancias. Con inteligencia, una adecuada planificación y la determinación suficiente todo debe ser reconducible, aunque sea de una forma progresiva.

 

Además, el propio proceso de lucha por alcanzar un sueño es una fuente de energía y de realización en sí misma.