¿Eres o ejerces?
Tradicionalmente solemos referirnos a nuestra ocupación profesional apoyándonos en el verbo ser; por ejemplo, yo soy administrativo, director comercial, jefe de planta o consejero delegado.
Sin embargo cada uno de nosotros somos mucho más que eso, somos personas con unas características, circunstancias y valores determinados, y en el ámbito profesional jugamos un determinado rol de acuerdo con nuestro trabajo y posición. Sería por tanto más acertado referirnos a nuestra ocupación con el término “yo ejerzo de…“, que con el tradicional “yo soy…”.
Sea o no realista dicho cambio terminológico, lo que si es conveniente es que reflexionemos sobre el fondo de la cuestión; nuestra ocupación profesional es una faceta de nuestra vida, en la que se espera que “ejerzamos” un determinado rol en un periodo de tiempo determinado en base a nuestro perfil y capacidades. Pero en ningún caso deberíamos sentir que “somos” más o menos y que eso es algo estructural o definitivo, porque, además de no ser verdad, antes o después tendrá fecha de caducidad.
De nuevo, esta actitud mental nos ayudará a focalizarnos a desempeñar/ejercer el contenido de nuestro puesto de acuerdo al rol esperado, en lugar de vanagloriarnos de algo que creemos que somos u ostentamos.