Tus colaboradores serán: Cobardes si no te muestras valiente. Vagos si no eres trabajador. Indisciplinados si no tienes fuerza de voluntad. Pesimistas si no confías en...
Liderar
No es lo mismo tener el cargo de líder que liderar. El liderazgo no se impone sino que te lo reconocen. Los demás deciden voluntariamente seguirte, no porque les paguen o estén obligados, sino porque...
Dirigir
Dirigir es sobre todo practicar. Formarse y acreditarse pueden ayudar, pero la prueba definitiva es la aplicación práctica en la mejora del desempeño de las personas y...
El bien común
El bien común exige primero respeto a la persona, seguido del bienestar y desarrollo social, y la estabilidad y seguridad de un orden justo. Todo indica que en estos tiempos no...
Personas
Nunca tomes decisiones sin considerar en profundidad el impacto sobre las personas, ya sean los profesionales de tu organización, tus clientes, o los ciudadanos de tu...
Descríbelos
Es frecuente encontrar en los documentos de comunicación de las empresas la enumeración de los valores que las rigen. Y parece que las empresas se copiaran unas a otras por la repetición habitual de los mismos principios. Se suelen presentar en forma de un listado de conceptos atractivos con los que no es posible mostrarse en desacuerdo: Honestidad, Creatividad, Innovación, Excelencia, Comunicación, Justicia, Liderazgo, Servicio, Respeto al medio ambiente… Pero su enumeración no basta. Los valores son los principios que deben guiar el comportamiento de los miembros de la organización y orientar la toma de decisiones. Tienen que ver con el CÓMO se hacen las cosas y el modo en que se incorporan en las políticas y procesos de la empresa, con la construcción de la cultura de la empresa. Para que sean efectivos, me interesa destacar hoy tres aspectos: Los valores deben ser descritos y no sólo enumerados en forma de sustantivos. En su definición deben incorporarse verbos en su forma activa, que presenten el modo de hacer realidad esos valores. De otro modo es imposible que nadie en la organización pueda asumir de manera concreta la responsabilidad de aplicarlos. Se ha de establecer un sistema de incentivos que asegure su cumplimiento. Conocer la teoría no basta. El seguimiento de esos principios debe estar premiado y desviarse de ellos acarrear consecuencias. De otro modo, caerían rápidamente en el olvido. Predicar con el ejemplo. No puede imponerse aquello en lo que no se cree. Los directivos han de ser los primeros en ser consecuentes con esos principios y asumir la responsabilidad de moverse por ellos en toda ocasión. La descripción de los valores permite tener una idea clara de cómo actuar ante una situación determinada. Pero conocer el modo y circunstancias en las que...
Ellos también son
Los directivos son igualmente emprendedores. Desde concretar la misión a fijar objetivos, organizar tareas y distribuir los recursos. Y asumen la responsabilidad de unos resultados que aseguren la viabilidad de su...
Competencias
Las competencias contribuyen a marcar la diferencia. De ahí que lo inteligente sea incorporar a quienes dispongan de las necesarias o la capacidad de adquirirlas. Sólo los necios las...
Actitud
Es el factor determinante para lograr eficiencia y productividad. Y es el resultado de la relación con los demás y de la identificación con el propósito común. Tenerla de su parte debe ser el objetivo prioritario de todo...
Sorpresas
Debieras generarlas tú mismo y en tu propio sector. No importa lo maduro que esté, existen oportunidades ocultas para reactivarlo. Ya sea para atender a clientes excluidos o para proporcionar mayor valor a los ya se atienden de manera satisfactoria. No esperes a leer las orientaciones de consultores y asesores acerca del modo en que identifican la aparición de signos de cambio en un determinado sector. Puede que te lleguen demasiado tarde o te propongan iniciativas que no se ajustan a ti. El crecimiento económico vinculado al rejuvenecimiento de unos sectores o la aparición de otros nuevos depende de las decisiones de directivos y emprendedores que ejecutan decisiones sorprendentes para el resto: Identifican nuevos hábitos de consumo. Adoptan ideas de otros sectores. Mejoran la eficiencia de los recursos que emplean. Cambian sistemas de producción. Modifican la manera en que distribuyen o entregan sus propuestas de valor. Incorporan complementos adicionales de elevado interés. Revolucionan los precios que cobran o el sistema de ingresos. Es cierto que hay gente experimentando. Pero pocos todavía, y en algunos sectores que son motores determinantes de nuestro desarrollo, casi nada. Ahora que nos aplauden por el modo en que salimos la crisis y que nos señalan como futura locomotora (¡eso si que es una sorpresa!), analiza si eres de los que activamente lidera la incorporación de innovaciones o si tan sólo te dejas arrastrar. No te dejes sorprender y sé tu quien dé la sorpresa....