Muchos reconocen la importancia de la red de contactos para la consecución de sus objetivos. Pero no se ocupan de desarrollarla porque piensan que es artificial. No se ven cultivando esas relaciones y creen que harán mejor en ocuparse de aspectos operativos del negocio. La capacidad de relacionarse es crucial para la gestión del cambio y el logro de resultados. He aquí algunas ideas para cultivarla: Dedica tiempo. No puedes olvidarte de tus contactos. Has de mantener viva la relación. No puedes delegarla o subcontratarla. Identifica coincidencias. Descubre qué cosas tenéis en común. Apóyate en la información de la distintas redes sociales para conocerle mejor de antemano. Extiende tu red. El trabajo de establecer conexiones de manera franca y sin discriminar hace que se refuercen y que cada vez sea más sencillo de construir. Sé concreto. Hay gente muy ocupada y no hagas que recaiga sobre ellos la responsabilidad de atenderte. Propón de modo concreto tu necesidad y modo de resolverla. Diversifica. No te cierres sólo a unos ámbitos determinados. No desprecies el valor de una red variada aunque algunos elementos parezcan quedar lejos de tus intereses actuales. Cumple lo que prometes. Mantén tus compromisos y tu credibilidad. Te facilitará el ganar la confianza. Piensa en el largo plazo. Busca consolidar la relación y no en solucionar tus interés más inmediatos. Cuida las formas. Piensa el modo más adecuado de dirigirte a esos contactos que quieres desarrollar a partir de sus propios intereses. Mantén el contacto. No te olvides de mantener viva la relación y ofrece oportunidades para hacerla más amplia y extensa. Sus efectos beneficiosos se notarán tanto en el ámbito personal como profesional....
Pedir consejo
Cuando pides ayuda o consejo a una persona, habitualmente te granjearás su simpatía y estará bien dispuesta a ayudarte. Lo hará tanto por ti como por satisfacer una propia necesidad, la de verse útil y sentirse bien consigo mismo. Del mismo modo es importante mostrar agradecimiento por su ayuda y atención y hacer lo posible por aportar también valor a su vida....
Groseros
Ante una grosería, es muy común reaccionar con otra igual. Quizás proporciona una satisfacción temporal pero no te ayuda a la larga. Piénsalo. No necesitas rebajarte a su nivel. No serás capaz de obtener lo que necesitas de ese contacto o colaborador y te habrás ganado un enemigo que se lo cobrará algún día....
Agradecidos
Está bien ser agradecido cuando han hecho algo por ti. Pero es aún mejor mostrar agradecimiento por anticipado. Harán entonces todo lo posible por proporcionarte lo que les pidas. Pero es crucial que te expreses con sinceridad y humildad y que no suene como una exigencia implícita. Parecerías manipulador y autoritario....
Otro día…
Tras esa expresión se esconde la peor trampa para tu desarrollo personal. Es lo que frena todas esas cosas que querrías hacer, el gran obstáculo para alcanzar tus objetivos. Es un fenómeno muy extendido. Todos queremos mejorar pero pocos están dispuestos a cambiar. Y para crecer hay que cambiar. Es necesario, por tanto, tener la determinación de abordar ese cambio y hacerlo sin demora. Estos pasos pueden ayudarte a lograrlo: Hazte la gran pregunta. ¿Hasta dónde quieres llegar? No es que puedas responderla ahora; seguramente se mantendrá vigente durante muchos años, pero te ayudará a señalar el rumbo. Servirá para ponerte en marcha, para aprovechar los talentos recibidos. Cuanto más trabajes con ellos, mayor será tu potencial y más lejos llegarás. Empieza ahora. Te lo has de repetir cada día, desde primera hora, infinidad de veces. Necesitas que te transmita el sentido de urgencia que precisas para abordar todo eso que siempre acabas dejando para más adelante. Afronta el miedo. Puede ser muy variado: al fracaso, a lo que otros digan, a la inseguridad financiera o al riesgo de lo desconocido. Unos te afectarán más que otros pero ten la tranquilidad de que nadie está libre de ellos. Por suerte dispones también del coraje para superarlos. Sólo necesitas descubrir la motivación que te empuje a hacerlo. Toma la decisión. No puedes acomodarte y esperar que el cambio se tropiece contigo. Debes decidirte y asumir la responsabilidad de cambiar, de aprender de los errores, de incorporar nuevos hábitos, de nunca detenerte. Tu desarrollo personal no es algo que te ocurre, un accidente con el que tropiezas. Tienes que perseguirlo. Otras notas relacionadas: Fases del cambio Coaching 7×52...
Ponte en sus zapatos
Cuando alguien dice o hace algo que te ofende o no casa con tu modo de ver las cosas, en vez de reaccionar, responde preguntándote e imaginando qué le puede estar pasando en su vida que le ha llevado a desplegar esa actitud tan dura. Esa consideración te llevará a responder con compasión y comprensión en vez de reaccionar con odio y enfado....
La amabilidad
Es un hábito, una manera de vivir que vale la pena cultivar y practicar. Las personas amables no esperan la aparición de ocasiones en las que mostrarse considerados; crean oportunidades para hacer la vida más cómoda y agradable para los que les rodean....
Responde
Elige entre responder o reaccionar. Responder es una actitud positiva; actúas de manera reflexiva y madura, y contribuye a que alcances tus logros. Reaccionar es una disposición negativa, caracterizada por la pérdida de control y que tiene el efecto contrario....
Tacto
Es la capacidad de decir o expresar una opinión de tal manera que la otra persona no se ofende sino que incluso acoge tu sugerencia. Escucha lo que dices en tus conversaciones habituales y seguramente te sorprenderá descubrir la falta de tacto y sensibilidad en el modo en que te relacionas con los demás....
Defiende tu personalidad...
Pocos reconocen la verdadera importancia de la propia personalidad y muchos menos se preocupan de protegerla. Tu personalidad es tu posesión más valiosa, es un activo que debes custodiar y vigilar. Es una obligación que nace del valor que representa para ti. Si no la cuidas no podrás transmitir ese valor a las personas con las que te relacionas. Ni tampoco podrás sacar el máximo partido de ella. No tienes que convertirte en una persona diferente de quien eres sino en una persona diferente de las demás. No tienes que ser perfecto en todo sino extraordinario en algo....