El origen de la jerarquía
En las organizaciones convencionales caracterizadas por la relación univoca entre autoridad y responsabilidad, las estructuras jerárquicas se basan en los tres principios tradicionales de cadena de autoridad, unidad de mando y span de control:
- La cadena de mando; los niveles jerárquicos
- La unidad de mando; reporte a un manager
- El “span de control”; número de empleados por nivel de reporte. Es decir número de personas que dirige cada mando o “manager”
Existe en definitiva una relación directa entre jerarquía, autoridad y responsabilidad.
La contribución principal de la jerarquía es la forma en que identifica y apuntala la responsabilidad. Todas las organizaciones requieren un proceso a través del cual el trabajo es asignado y su ejecución evaluada de acuerdo con los criterios establecidos.
Por otro lado las decisiones que una compañía debe tomar están entre un rango de rutinarias y no rutinarias:
- Decisiones rutinarias; aunque sean importante para la compañía las decisiones más rutinarias no requieren alto nivel de juicio y discreción y por lo tanto de responsabilidad y autoridad
- Decisiones no rutinarias; son de naturaleza más estratégica, tienen impacto a largo plazo y mas compromiso económico y están sometidas a mayor incertidumbre. Estas decisiones requieren un mayor nivel de responsabilidad y autoridad
Por todo ello la relación entre decisiones rutinarias y no rutinarias es jerárquica en su naturaleza, trasladándose las decisiones más rutinarias hacia los niveles inferiores de la jerarquía y las no rutinarias o estratégicas a los superiores.
Finalmente mencionar que la jerarquía ofrece una mayor facilidad de promoción al existir la oportunidad de evolucionar paso a paso de una forma progresiva.