¡No vendas!

En efecto, de eso se trata.
Es lo que pide Apple a sus empleados en las tiendas, y son precisamente las suyas las que más venden del mundo por metro cuadro.
Lo explica este artículo del Wall Street Journal. Y lo acompaña de esta copia de una hoja del manual que no está disponible, claro.
La insistencia es en que el trabajo del vendedor consiste en:

  • Comprender las necesidades del cliente, quien puede incluso ignorar cuáles son.
  • Buscar las soluciones a sus dificultades y no de tratar de cerrar una venta.

De ahí que no les paguen comisiones ni tengan cuotas de venta a alcanzar. Y el acrónimo de APPLE se corresponde también con la descripción de los pasos a seguir en la provisión del servicio y que pueden traducirse como:

  • Recibir al cliente con un cálida bienvenida.
  • Sondear al cliente de manera educada para comprender todas sus necesidades.
  • Proponer al cliente una solución que pueda llevarse de inmediato.
  • Escuchar y resolver otros temas y preocupaciones.
  • Acabar con un afectuosa despedida y una invitación a regresar.

Pues eso: escucha, trabaja, toma decisiones, sé amable y… ¡a olvidarse de vender!