Para vencer la resistencia al cambio

change-resistanceSeguro que más de uno se encuentra ante la necesidad vencer la resistencia al cambio en su organización y habrá quien haya experimentado recientemente la incapacidad para superarla.

Me parece de interés comentar las dos vías para lograrlo que se describen en este artículo de hace ya unos años.

La vía denominada tradicional se centra en arreglar lo que no funciona, y actúa de arriba abajo en la organización, y de fuera adentro. Se caracteriza por:

  • Estar liderada desde lo alto de la organización, que es quien promociona el cambio.
  • Se promueve desde fuera mediante la identificación de las prácticas más acertadas.
  • Se fija en las deficiencias y mira de resolverlas.
  • Obedece a la lógica impuesta por la nueva manera de actuar.
  • Genera resistencias al tratar de implantar ideas de desconocidos y que vienen del exterior.
  • Parte de la identificación de problemas en el contexto actual en la organización.
  • Se personalizan las iniciativas de cambio en los responsables de los problemas.

 

La vía denominada de “desviación positiva” o del cambio incremental, al contrario de la anterior, evoluciona de abajo arriba y de dentro afuera. Se caracteriza porque:

  • El líder actúa como facilitador y hace que sea la organización la que busque el cambio.
  • Son los propios participantes los que identifican soluciones internas y las desarrollan.
  • Se apoya en conocimientos preexistentes que han tenido éxito con anterioridad.
  • Avanza porque los participantes adoptan una nueva manera de pensar.
  • Se acepta bien, sin resistencias, porque se reconoce como propia.
  • Asume un contexto nuevo y más amplio que se abre a un número mayor de soluciones posibles.
  • Incorpora a un número mayor de personas y no sólo a los directamente implicados en los problemas.

 

Ninguna de las dos vías garantiza vencer la resistencia al cambio en cualquier circunstancia ni en todas la organizaciones. Las características de la resistencia, las dimensiones de los problemas que determinan el cambio y la capacidad de control del proceso harán más eficaz un abordaje u otro.

En todo caso, presta atención a las posibles consecuencias que se podrían generar y que no puedes anticipar, y trata de reducir la presión social que bloquearía tus iniciativas.

¡Buena suerte…!