Los detalles
El secreto del éxito en cualquier ámbito de la vida está en la observación cuidadosa de los pequeños detalles. Todo el mundo presta atención a las grandes cosas, sin considerar que están formadas de multitud de pequeños elementos que, si se ignoran, se agrandan y se vuelven difíciles de manejar.
No todos tienen la capacidad de hacer cosas monumentales, de ser personajes públicos destacados… Pero cada uno es capaz de sobresalir de la media apoyándose en la infinidad de esas pequeñas cosas a las que atiende y que para el resto pasan desapercibidas o son despreciadas. Quien ha adquirido el hábito de cuidar los detalles es capaz de responder a las exigencias de los grandes retos.
La grandeza de una persona está en las sencillas palabras de amabilidad, en los pequeños sacrificios personales en beneficio de los demás, en el agradecimiento por los servicios recibidos, en la utilización diligente de los talentos propios. Esas tareas aparentemente insignificantes, bien realizadas, te proporcionarán las mayores recompensas, y si las abandonas, te ocasionarán un perjuicio incalculable. Cuídate de ellas cuando se presenten en tu vida. No las deseches por su aparente poca importancia pues se volverán relevantes. Las que decidas hacer o las que optes por ignorar serán la medida de tu profesionalidad.
La realización de esas pequeñas cosas es lo que transmite mayor seguridad, a ti mismo y a quienes te rodean. Son la fuente de confianza y de valor ante los demás. Piensa en ellas y considera qué es lo que dicen de ti cuando las desprecias, los riesgos que asumes, la pobre calidad que aceptas, el valor que pierdes…
Es en esas pequeñas cosas donde se notará tu impacto, donde dejarás huella.