Su opinión

El conocimiento que tienes de ti mismo suele estar condicionado por tus creencias y experiencias, por tus estados de ánimo. Todo ello hace difícil que dispongas de una imagen propia objetiva y con frecuencia existirá una gran disparidad entre cómo te ves y cómo te ven los demás. De esa discordancia puedes aprender mucho.

La opinión de amigos, colaboradores, mentores o familiares te ayudará a comprender esa parte de ti que resulta más esquiva. Si te atreves a consultarles, pide ejemplos concretos y situaciones específicas y descubre las coincidencias en sus pareceres.

Esa perspectiva te dará pistas acerca del modo en que tu temperamento y actuaciones afectan a los demás. Y ese conocimiento, que pocos alcanzan, es extremadamente valioso.