No te escondas

Es perverso. Imagino que también tu has pasado por la experiencia de buscar a través de la página web de una empresa el modo de contactar con ella y no lo has conseguido.

Bajo la apariencia de abrir las líneas de comunicación con sus clientes en todo momento y desde cualquier lugar, en vez de incrementar el servicio que nos prestan, lo cierto es que acaban por no dar ninguno. En la práctica resulta una manera de evitar el contacto con nosotros. Ahora perdemos nuestro tiempo dando vueltas por multitud de páginas para acabar con una dirección de correo donde enviar una pregunta o una queja que acaba por quedar sin respuesta (No es el caso de Amazon, aclaro).

Y si eres afortunado y encuentras un número de teléfono comenzarás el periplo de transferencias de unos operadores a otros, porque siempre aquél con el que hablas no puede resolverte el problema, y acabas donde empezaste o directamente desconectado en algún momento del proceso. El resultado: tiempo perdido  en un supuesto servicio de atención personalizada, subcontratado  con interlocutores en países extranjeros que te leen un guión preestablecido y del cual no saben como salirse.

Asegurémonos de dar la cara siempre.